¿Se pueden considerar los juegos en línea como arte?
31 Ago 2010
Actualmente se está debatiendo si los juegos entran en la esfera del arte o no. Uno de los defensores de la postura de que los juegos sí son arte es Kellee Santiago. Ella argumenta que los juegos aún se están desarrollando, tanto con respecto a su creación por parte de los productores de juego como con respecto a las expectativas y apreciación por parte de su público. Alguna vez los jugadores sólo gozaban de los juegos por sus desafíos y recompensas. Sin embargo, la moralidad en aumento de éstos fomenta la contemplación de asuntos sociales y culturales. Este tema, expresa Santiago, atrae a las emociones, las transforma en pensamiento y, por último, se los clasifica como arte.
Pero hay gente que no está de acuerdo con los argumentos de Santiago. El famoso crítico de cine Roger Ebert no tiene la misma opinión que Santiago. El expresa: “Una diferencia evidente entre el arte y los juegos es que alguien puede ganar un juego. Tiene reglas, puntos, objetivos y un resultado”. Luego Ebert continúa: “Nunca nadie que haya estado dentro o fuera del campo ha sido capaz de citar un juego que se pueda comparar con los grandes pintores, cineastas, novelistas y poetas”.
Este debate ha recibido mucha atención y muchos han expuesto sus puntos de vistas. La popularidad de los juegos en línea va en aumento. Su gráfica siempre va mejorando y el énfasis está puesto en los efectos de sonido, la espectacular gráfica, las funciones interactivas y también en dilemas tanto físicos como morales. Además, los desarrolladores de software de juegos en línea, tales como PlayTech y Microgaming siempre están encontrando nuevas formas de enganchar a su público. ¿Entonces, por qué los juegos no han de ser considerados como arte?